
Montaje de Fotos en Era Análoga
Los montajes fotograficos solo los podían hacer -en la época de la fotografía análoga- los fotografos profesionales o los aficionados serios que disponían de una cámara que permitiera hacer doble exposición. También era posible hacerlo en el cuarto oscuro pero siempre con muchas limitaciones.
Para hacer estos foto montajes lo que se hacía era, en la primera toma, reservar o tapar parte del lente donde quedaría colocada la segunda foto. Y en la toma de esta última había que reservar el espacio tomado dentro del negativo o diapositiva por la primera fotografía.
Era un poco de ensayo y error para lograr la toma compuesta exacta. Obviamente, el montaje de las fotos era notorio ya que los bordes de cada foto no eran nítidos sino bastante difusos, para lograr una transición suave entre las dos imágenes fotográficas.

Algunas empresas como COKIN vendían un set de filtros para facilitar estos montajes. En este caso el negativo o positivo era uno solo, ya que venía la imagen compuesta.
La foto de la derecha muestra uno de los existentes en esa época. Su uso era muy sencillo: simplemente se colocaba mediante una adaptador o porta-filtros en frente del lente, se hacía la primera exposición y luego se giraba 360 grados para hacer la segunda.
En el cuarto oscuro se podían combinar dos negativos para hacer el montaje. En estos casos había que seguir la misma técnica de exponer el papel del primer negativo reservando el espacio para la segunda exposición.
Recuerdo que uno de los montajes clásico en la FOTOGRAFIA de BODAS era hacer un a toma de la parte externa de la iglesia y posteriormente montar una foto de los novios en el cielo, a un lado de las torres. A muchas personas este tipo de montajes les paracía algo cursi…
Los Montajes Fotograficos en la Era Digital
La era digital le ofrece al fotógrafo profesional y a quien maneje Photoshop de hacer montajes fotográficos de una manera relativamente fácil.
Digitalmente se pueden combinar tantas fotos cuantas se deseen. Lo único que hay que hacer es seleccionar cuidadosamente partes de cada fotografía y montarlas sobre otra o sobre un fondo cualquiera.